Pagar la matrícula universitaria con tarjeta de crédito casi nunca tiene sentido. Una razón es el interés compuesto. Si carga su matrícula a una tarjeta de crédito y luego no la paga en su totalidad, el saldo restante estará sujeto a una APR (Tasa de Porcentaje Anual (Annual Percentage Rate) que es mucho más alta que la que cobraría cualquier préstamo estudiantil tradicional.
La mayoría de los expertos financieros le aconsejarían que pagar su matrícula con tarjetas de crédito sólo debe utilizarse como último recurso mientras trabaja para negociar los pagos directamente con su colegio o universidad.
Asimismo, los administradores de préstamos para estudiantes no aceptan tarjetas de crédito. Por un lado, las regulaciones federales generalmente lo prohíben. Además, cada transacción con tarjeta de crédito implica tarifas de procesamiento que paga la parte que acepta la tarjeta como pago. Los prestamistas ciertamente no pagarán esas tarifas, como lo hacen las tiendas.
Las tarjetas de crédito a menudo conllevan varios costos ocultos que pueden acumularse rápidamente y provocar que usted se endeude aún más rápido. Estos incluyen cargos por pagos atrasados, cargos anuales, cargos por adelantos de efectivo o cargos por transferencia de saldo (si corresponde).
También existen multas por exceder su límite de crédito (tarifas por exceso de límite) y más.
Es posible que su universidad permita a los estudiantes pagar la matrícula y las cuotas con una tarjeta de crédito, pero probablemente no sea una buena idea.
Pagar cualquier cosa con plástico requiere un plan para deshacerse de su saldo rápidamente y evitar que se acumulen cargos por intereses. Además, muchas escuelas cobran tarifas de conveniencia que podrían costar más que el valor de los puntos de recompensa o los bonos de devolución de efectivo que espera obtener con su tarjeta.
Tarifas de conveniencia
Verifique si la escuela agrega un cargo adicional, llamado tarifa de conveniencia, para aceptar pagos realizados con tarjeta.
Las universidades con tarifas de conveniencia suelen cobrar el 2,75% del pago total, en promedio, según una encuesta de 410 instituciones realizada por la Asociación Nacional de Oficiales de Negocios de Facultades y Universidades.
Eso significa que si paga $2,000 por la matrícula, se le cobrarán $2,055 a su tarjeta. Cuanto mayor sea el pago, más cara será la tarifa.
Cargos por intereses
Los colegios comunitarios son el tipo de escuela con mayor probabilidad de aceptar pagos con tarjeta de crédito (y el menos propenso a cobrar una tarifa de conveniencia), según la encuesta de la Asociación Nacional de Oficiales de Negocios de Colegios y Universidades.
Pero incluso entonces, no es una buena idea pagar con tarjeta de crédito si planeas mantener ese saldo de mes a mes. A menos que tenga una tarjeta que no cobre intereses durante un período introductorio, mantener un saldo podría significar pagar grandes cantidades de intereses. Por ejemplo, dejar un saldo de
$2,055 en una tarjeta con una tasa porcentual anual del 17% acumulará alrededor de $29 en intereses solo en el primer mes.
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