Cualquiera que tiene un auto, sabrá que éste tiene un sistema electrónico digital programable que ejecuta comandos para procesar los datos del funcionamiento del vehículo; se trata de la que comúnmente llamamos la computadora.
Lo que muchos no saben es que, a través de este dispositivo, las empresas que fabrican carros, pueden obtener información sensible como, velocidad, uso de los pedales de dirección, freno y acelerador, uso del cinturón de seguridad, configuración de info, entretenimiento, los contactos del teléfono celular, destinos de navegación, datos de voz, tu ubicación y entorno.
Pero eso no es todo, investigadores analizaron los términos de privacidad de 25 marcas de automóviles, que recopilaban una variedad de datos de los clientes, y determinaron que obtienen datos, desde expresiones faciales hasta actividad sexual, hasta cuándo, dónde y cómo conduce la gente.
Además de los datos ingresados directamente en el sistema de info, entretenimiento de un automóvil, muchos automóviles pueden recopilar datos en segundo plano a través de cámaras, micrófonos, sensores y teléfonos y aplicaciones conectados.
Los fabricantes de automóviles pueden monitorear los motores, actualizar el software y controlar el rendimiento del tren motriz, incluso de forma remota.
Estos fabricantes justifican, la invasión de la privacidad, con que la asistencia al conductor es uno de los mejores usos de la IA en la industria automotriz. Señalan que, los sistemas habilitados por IA utilizan sensores para ayudar con la dirección y la detección de peatones, monitorear los puntos ciegos y alertar al conductor, lo que le permite tomar medidas preventivas para mantenerse protegido contra accidentes de tráfico.
Lo cierto es que, los automóviles con funciones conectadas a Internet se están convirtiendo rápidamente en máquinas de recolección de datos que todo lo ven.
La gravedad del asunto se ahonda cuando los datos recopilados se venden a terceros, como corredores de datos, y estos a su vez los comercian a las empresas aseguradoras, qué valiéndose de la información, la procesan y elaboran diagnósticos sobre usos inapropiados del carro, y por consiguiente elevan los montos de las primas del seguro.
Los propietarios de vehículos, pueden solicitar la información recopilada por los fabricantes, mediante una solicitud, pero se advierte que deben esperar bastante tiempo para recibir una respuesta.
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