En los Estados Unidos, generalmente, necesitas de historial de crédito, dirección postal y comprobación de ingresos para pedir un préstamo; como extranjero no residente, deberás reemplazar esos requisitos.
Las entidades financieras, entre ellas bancos, son muy rigurosas en la calificación de clientes que solicitan préstamos, tratan de asegurar la devolución del dinero entregado y el pago de los respectivos intereses.
Por tanto, desconfían de los no residentes, así como de los inmigrantes ilegales, a los cuales generalmente exigen garantías para poder accederles a un préstamo.
Sin embargo, es posible que como extranjero no residente puedas obtener un préstamo, pero con mucha dificultad.
Cuando eres un migrante indocumentado, hay algunos productos y servicios que podrían ser difíciles de conseguir.
Debes informarte cuán posible es que te aprueben un préstamo personal cuando eres extranjero no residente, incluso si eres un visitante temporal.
La buena noticia es que en Estados Unidos, es posible obtener un préstamo personal, sin ser residente legal. Será más difícil; pero no imposible.
Uno de los requisitos usuales es tener un aval o una dirección dentro del país, pero hay algunas instituciones que pueden prescindir de esas condiciones,
incluso de aquellas que suelen ser primordiales como el historial de crédito y número de Seguro Social.
Sin embargo, como es lógico, si encuentras un préstamo personal para no residentes, que no soliciten tantos requisitos, eso se compensa con otras características. Por ejemplo, si encuentras una institución que te pueda dar un préstamo personal sin ser residente, lo más seguro es que te cobrará una alta tasa de interés.
Otro problema que puede impedir se te brinde el préstamo es el tiempo de tu estadía en Estados Unidos. Si al momento de realizar la solicitud, hablas de una temporalidad en el país, es posible que no apruebes por el riesgo que significas para el prestamista que abandones el país sin pagar.
La mayoría de los préstamos para no residentes que se aprueban son para aquellos que planean quedarse y trabajar en los Estados Unidos durante al menos tres años después de tomar el préstamo.
En algunos casos, el prestamista te podría solicitar:
- Un reporte crediticio que supla un historial de crédito en el país, este documento podría ser una cuenta de alquiler, de servicios públicos o un seguro de vida.
- Un historial de crédito por parte de una agencia extranjera independiente de los informes de crédito.
- Una verificación escrita de prestamistas extranjeros para establecer un historial de crédito.
- Una visa válida
- Formulario de autorización de empleo
- Un aval o cofirmante establecido en Estados Unidos
- El formulario que declare que estás autorizado a trabajar dentro de Estados Unidos.
Ten en cuenta que, dependiendo de la institución, podrías calificar a un préstamo personal especial para no residentes.
Hay préstamos a corto plazo, de entre tres y cinco años, que sólo ofrecen pequeñas cantidades de dinero, en montos que van entre los $1,000 y $2,500 dólares.
Es posible obtener préstamos personales para indocumentados, incluso si no gozas de un estado legal de inmigración y no tienes un Número de Seguro Social válido.
Algunas instituciones financieras te permitirán usar un ITIN en lugar de tu SSN cuando requieras obtener préstamos personales para indocumentados.
El ITIN (Individual Taxpayer Identification Number o Número Individual de Identificación del Contribuyente) es un número de procesamiento de impuestos.
La oficina del IRS emite números ITIN a aquellos que no son elegibles para obtener un Número de Seguro Social válido, pero que están obligados por ley a presentar una declaración individual de impuestos sobre la renta.
Es decir, todos los ciudadanos extranjeros que deban presentar impuestos federales, pueden obtener un ITIN, independientemente de su estado migratorio.
Una de las cosas que debes tener en cuenta es que obtener un ITIN no cambiará tu estado migratorio, pero te permitirá solicitar préstamos que solo requieren un ITIN.
Hoy en día, es una obligación para todos los individuos en los Estados Unidos declarar sus impuestos, independientemente de su estado migratorio.
Incluso los inmigrantes indocumentados tienen que declarar impuestos por ley si están trabajando y ganando un salario en los EE.UU.