La educación universitaria o de posgrado, en los Estados Unidos, no es gratuita, por lo que quienes utilizan esos servicios deben recurrir a préstamos, muchas veces difíciles de pagar.
Se puede recurrir a préstamos federales que son préstamos directos otorgados directamente por el Departamento de Educación de Estados Unidos, Préstamos PLUS, que son préstamos federales que pueden utilizar los estudiantes de posgrado o profesionales y los padres de estudiantes de pregrado dependientes para ayudar a pagar la universidad o la escuela de formación profesional.
Usted no tendrá que comenzar a pagar los préstamos estudiantiles federales hasta que se gradúe, se retire de la escuela o cambie la carga horaria de su matrícula a menos de la mitad del horario completo.
También son asequibles los préstamos privados, a veces llamados préstamos alternativos, que son ofrecidos por prestadores privados, como bancos y cooperativas de crédito. No están respaldados por el gobierno federal y no incluyen los beneficios ni las protecciones que ofrecen los préstamos estudiantiles federales.
Estos préstamos también podrían exigir un garante (un aval de otra persona que también será responsable de pagar el préstamo) y una verificación de crédito (una revisión de su historial de crédito).
Muchos préstamos estudiantiles privados le exigen que pague mientras todavía está en la escuela.
Las tasas de los préstamos federales suelen ser fijas y más bajas que las tasas de los préstamos privados. Los préstamos estudiantiles privados pueden tener tasas de interés variable y resultan más caros.
Cuando tiene problemas para realizar los pagos, los préstamos federales le brindan la facilidad de la consolidación de deudas que es una manera de hacer que la liquidación de su deuda sea más fácil de manejar. En lugar de efectuar varios pagos mínimos mensuales en diversas cuentas, esta estrategia de pago implica obtener un nuevo préstamo para combinar y cubrir sus otros préstamos o deudas.
Por su parte, con los préstamos privados usted puede entrar en mora por unos pocos motivos. Podría entrar en mora si se saltea tres pagos mensuales (120 días), se declara en bancarrota, o incumple el pago de otro préstamo.
Existe una variedad de tipos de ayuda financiera para ayudarlo a pagar su educación después de terminar la escuela secundaria. Esto incluye subsidios y becas de estudio, programas federales de trabajo y estudio, y préstamos estudiantiles.
Los subsidios y becas le otorgan dinero para estudiar y usted no tiene que devolverlo. Así que deberían ser su primera opción para pagar su educación. La forma más simple de solicitar un subsidio es completar el formulario llamado Free Application for Federal Student Aid (FAFSA).
Asimismo, los empleos federales de trabajo y estudio son otra forma de ayuda para pagar los estudios universitarios. Este tipo de empleo es un subsidio basado en las necesidades que requiere que usted trabaje a tiempo parcial mientras está estudiando.
Pero se debe tener cuidado, porque algunas compañías prometen ayudarlo a reducir su deuda de préstamos estudiantiles a cambio del pago de un cargo. No hay nada que esas compañías puedan hacer por usted, que usted no pueda hacer por su cuenta y de forma gratuita.
Cuando está tratando de determinar si un ofrecimiento de ayuda financiera cubrirá una cantidad suficiente de los costos de su educación para que sus estudios sean asequibles, la herramienta de búsqueda de ofrecimientos de ayuda financiera de la CFPB (Oficina para la Protección Financiera del Consumidor de los Estados Unidos) le puede ser útil.
Nunca acepte ayuda de extraños o compañías que ofrecen servicio de facilidades para obtener becas o subsidios a cambio de pago. Se trata de estafadores.
Igualmente ofrecen ayuda, la oficina de ayuda financiera de una universidad o escuela de formación profesional. El consejero de su escuela secundaria o un consejero TRIO. La herramienta gratuita de búsqueda de becas del Departamento del Trabajo de los Estados Unidos. Agencias federales. Las agencias educativas de su estado.
Se suman búsquedas en internet y en su biblioteca. Fundaciones, organizaciones religiosas o comunitarias, negocios locales o grupos cívicos. Organizaciones relacionadas con su campo de interés, como por ejemplo, las asociaciones profesionales. Organizaciones y grupos dedicados a la preservación del patrimonio étnico y cultural. Su empleador o el empleador de sus familiares.
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